Locura-Utopía-Ética
Portada. Marge Piercy, Woman on the Edge of Time. Nueva York, Fawcett Crest, 1976.
En este módulo abordamos la novela Woman On The Edge of Time (Nueva York, Fawcett Crest, 1976) de Marge Piercy, como una entrada al tema de feminismos e imaginaciones especulativas. La portada blanca—ya amarillenta--de un libro de bolsillo de pasta suave, con una decoración que evoca el estilo psicodélico de los años sesenta y setenta, entremezclando las caras de figuras masculinos y femeninos un círculo del que parecen emanar otros círculos de colores, nos introduce en el mundo de marginación y violencia de Consuelo Ramos, una chicana de origen tejana internada en un hospital psiquiátrico en Nueva York, y a través de ella, en una utópica opción para el futuro, en la que la dicotomía de género ha dejado de regir las relaciones humanas, objetivas y subjetivas. ¿O se trataría de una alucinación esquizofrénica, de esta paciente de 35 años, cuyo expediente médico aparece reproducido, en extractos, en las páginas finales del volumen?
La trama alterna entre la historia—narrada en tonos que recuerdan la literatura naturalista del siglo XIX--de esta mujer cuya opciones vitales y posibilidad de escoger su destino se han ido cerrando (nos enterramos de esto en el ir y venir de su memoria, y la narración de sus experiencias en el hospital donde la quieren someter a una intervención cerebral experimental que permite anular su voluntad) y la esperanza encarnada por el mundo de Mattapoisett en 2137, una comunidad rural donde—en contraste con las visiones futuristas que suele encarnar la ciencia ficción—se ha puesto la tecnología y la renovada organización de las interacciones humanas y un sistema político no-jerárquico, al servicio de la igualdad humana y el uso cauto y para el beneficio colectivo de los recursos naturales. La vivencia de Connie, entre estos dos mundos, le permite construir, aún desde sus circunstancias de encierro, opciones de lucha y toma de decisión que enfrentan el sistema que la oprime, y a la vez la narración permite a la lectora analizar y reflexionar desde una postura de conciencia política feminista, sobre los mecanismos de poder y sus efectos en instituciones como la maternidad, el matrimonio y la convivencia social, no desde una perspectiva acrítica, sino desde una reconfigurada consciencia de sus implicaciones tanto en la cotidianidad material así como en los aspectos afectivos e identitarios de instituciones como la maternidad y las relaciones de pareja.
Publicada en 1976, esta novela, a la vez realista y aliada con la ciencia ficción y la literatura fantástica (aunque Piercy la caracterizara mejor como “ficción especulativa”), puede vincularse cercanamente con el análisis que propone Judith Butler sobre el sujeto femenino y la identidad de género en su texto “Problemas de género, teoría feminista y discurso psicoanalítico”. Considera la identidad de género como un performance fundamentado en estrategias narrativas construidas, ficcionales, que comúnmente proponen un modelo normativo de un sujeto unificado, pero que también se pueden desconstruir para abrir posibilidades no sustentadas en una concepción dicotómica y esencialista de la diferencia sexual. En Woman on the Edge of Time la confrontación en la conciencia de la protagonista y por extensión en la lectora, del mundo de los años setenta con su desconstrucción y reconfiguración a mas de 150 años de distancia, abre la posibilidad de nuevas construcciones de significado y afecto que transforman las lecturas políticas de la cotidianidad y el poder humano, en términos de corporalidad, lenguaje, estructura económica, reproducción, crianza y relaciones afectivas y sexuales. Indica Piercy: “With Woman On The Edge Of Time, I wanted very strongly to create a society not at all fantastic but one we can have if we fight for it, one almost attainable now, in which feminist values are the prevailing values. I wanted to imagine the people of a nonsexist society, one which socialized people to be cooperative, gentle, open, respectful of other living beings, in touch with their own various layers of mind and feeling.”
La trama alterna entre la historia—narrada en tonos que recuerdan la literatura naturalista del siglo XIX--de esta mujer cuya opciones vitales y posibilidad de escoger su destino se han ido cerrando (nos enterramos de esto en el ir y venir de su memoria, y la narración de sus experiencias en el hospital donde la quieren someter a una intervención cerebral experimental que permite anular su voluntad) y la esperanza encarnada por el mundo de Mattapoisett en 2137, una comunidad rural donde—en contraste con las visiones futuristas que suele encarnar la ciencia ficción—se ha puesto la tecnología y la renovada organización de las interacciones humanas y un sistema político no-jerárquico, al servicio de la igualdad humana y el uso cauto y para el beneficio colectivo de los recursos naturales. La vivencia de Connie, entre estos dos mundos, le permite construir, aún desde sus circunstancias de encierro, opciones de lucha y toma de decisión que enfrentan el sistema que la oprime, y a la vez la narración permite a la lectora analizar y reflexionar desde una postura de conciencia política feminista, sobre los mecanismos de poder y sus efectos en instituciones como la maternidad, el matrimonio y la convivencia social, no desde una perspectiva acrítica, sino desde una reconfigurada consciencia de sus implicaciones tanto en la cotidianidad material así como en los aspectos afectivos e identitarios de instituciones como la maternidad y las relaciones de pareja.
Publicada en 1976, esta novela, a la vez realista y aliada con la ciencia ficción y la literatura fantástica (aunque Piercy la caracterizara mejor como “ficción especulativa”), puede vincularse cercanamente con el análisis que propone Judith Butler sobre el sujeto femenino y la identidad de género en su texto “Problemas de género, teoría feminista y discurso psicoanalítico”. Considera la identidad de género como un performance fundamentado en estrategias narrativas construidas, ficcionales, que comúnmente proponen un modelo normativo de un sujeto unificado, pero que también se pueden desconstruir para abrir posibilidades no sustentadas en una concepción dicotómica y esencialista de la diferencia sexual. En Woman on the Edge of Time la confrontación en la conciencia de la protagonista y por extensión en la lectora, del mundo de los años setenta con su desconstrucción y reconfiguración a mas de 150 años de distancia, abre la posibilidad de nuevas construcciones de significado y afecto que transforman las lecturas políticas de la cotidianidad y el poder humano, en términos de corporalidad, lenguaje, estructura económica, reproducción, crianza y relaciones afectivas y sexuales. Indica Piercy: “With Woman On The Edge Of Time, I wanted very strongly to create a society not at all fantastic but one we can have if we fight for it, one almost attainable now, in which feminist values are the prevailing values. I wanted to imagine the people of a nonsexist society, one which socialized people to be cooperative, gentle, open, respectful of other living beings, in touch with their own various layers of mind and feeling.”
Tania Magaña Bello, Línea, 2018, imagen en 20 fragmentos
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Teresa Serrano
A Room of Her Own
2003
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6:42 min
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