Mesa ser-vida
Jueves, 13 Junio 2013 23:16
Escrito por Félix Suazo
Pero ¿qué significa "mesa ser-vida"?. Más que un ingenioso juego de palabras hay en esta frase una premisa existencial que transforma el objeto en significado. En la performance de Gabriela, el mantel es también vestimenta y la servilleta es un detonante verbal hecho para activar el diálogo y no para reprimir profilácticamente la indiscreción de una boca abierta.
Enmarcada en los complejos debates sobre el género y las representaciones, Mesa ser-vida es una acción e instalación que presenta las historias de vida de varias mujeres. Ya emancipadas del fogón y el lavaplatos, "salidas de la nevera" como quien sale del closet, vienen a ocupar la mesa que (al menos en la literatura e iconografía bíblicas) sólo correspondía al maestro y sus discípulos. El milagro que allí se produce no es el de la multiplicación de los panes, sino el de la autoafirmación en el espacio de una cultura concebida y protagonizada por hombres.
Pero ¿qué significa "mesa ser-vida"?. Más que un ingenioso juego de palabras hay en esta frase una premisa existencial que transforma el objeto en significado. En la performance de Gabriela, el mantel es también vestimenta y la servilleta es un detonante verbal hecho para activar el diálogo y no para reprimir profilácticamente la indiscreción de una boca abierta.
En torno a la mesa, enfrente o al lado del otro (o de la otra), entre la palabra, el silencio de la masticación y el ruido de los cubiertos, se ventilan asuntos que trascienden el placer de la digestión. En el comedor, cuando los convidados se disponen a engullir sus respectivas raciones de alimento, no sólo se celebran las delicias del paladar; también se interrogan los silencios y las ausencias. Llega el momento en que lo que entra (el alimento) y lo que sale (la voz compartida de los comensales) se mezclan en una misma respiración, en un aliento coral, aunque no exento de tensiones, reservas y euforias.
Del performance e instalación Mesa ser- vida. Instalación correspondiente al performance realizado en el El Anexo, Caracas 2009. Fotografías - Mauricio Arechavala.
La instalación se exhibe actualmente en la exposición Correlatos artísticos, de la Revolución Mexicana a nuestros días. Museo de Bellas Artes de Caracas 2011