El equipo
Lunes, 13 Enero 2014 20:03
Escrito por Laura Quintanilla
El eterno poder femenino representado por la muerte galopante en un mundo de grandes contrastes, donde las guerras y la violencia parecen imperar, y donde afortunadamente también tenemos momentos felices que se dan al mismo tiempo pero en diferentes planos dimensionales, se ven unidos por un equipo de básquetbol de los años 30’s con la insignia representativa de una ilusión en una ciudad devastada por la guerra a la que se integran en un día incierto y que sólo puede ser resuelto trabajando en equipo para poder renacer. Alejándose en un cielo nublado por el humo, los bombarderos se llevan consigo el dolor, el sufrimiento, la pobreza y la desesperanza para que nazca en nosotros un nuevo día con un porvenir más luminoso y constructivo.
En este cuadro fue un reto lograr plasmar en una imagen lo terrible, lo grotesco y lo trágico con una situación inverosímil y que en conjunto logre transmitirnos una escena de singular belleza.
El eterno poder femenino representado por la muerte galopante en un mundo de grandes contrastes, donde las guerras y la violencia parecen imperar, y donde afortunadamente también tenemos momentos felices que se dan al mismo tiempo pero en diferentes planos dimensionales, se ven unidos por un equipo de básquetbol de los años 30’s con la insignia representativa de una ilusión en una ciudad devastada por la guerra a la que se integran en un día incierto y que sólo puede ser resuelto trabajando en equipo para poder renacer. Alejándose en un cielo nublado por el humo, los bombarderos se llevan consigo el dolor, el sufrimiento, la pobreza y la desesperanza para que nazca en nosotros un nuevo día con un porvenir más luminoso y constructivo.
En este cuadro fue un reto lograr plasmar en una imagen lo terrible, lo grotesco y lo trágico con una situación inverosímil y que en conjunto logre transmitirnos una escena de singular belleza.