Encierro solar
Martes, 21 Junio 2022 21:43
Escrito por
Encierro Solar. Arte de proceso. 20 días (210 horas). Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca.
Transmisión Online-Youtube y Facebook, 2020.
Foto Fausto Luna.
Materiales: flores diversas, equipo de destilación, principalmente.
www.elvirasantamariatorres.co.uk/single-post/2020/05/09/encierro-solar
Esta obra de arte de proceso concierne a la vivencia y transformación del tiempo y espacio en el ámbito físico, psicológico y artístico, más en estos días de amenazas invisibles, incertidumbre y encierro. Sin un tema específico a tratar, quise atravesar estos días cruciales en el desarrollo de la pandemia (Covid-19) en México, comprometiéndome con una labor de meditación activa, analítica y re-significante. Me propuse generar un proceso de deconstrucción y reconstrucción física y simbólica de materiales y elementos significativos para mí, y, muy posiblemente, abiertos y generosos hacia la percepción y apertura psíquica de otros individuos. Concretamente, me puse a producir tinta de diversas flores y me escribí con ella a mí misma en el devenir de un proceso que empiezo a altas horas de la noche con un periodo de 20 horas de trabajo ininterrumpido, y así, por veinte días, disminuyendo cada día una hora, me vi desplegar mi propio tiempo en un ensayo de la palabra, la acción, la noche, el día y algo que ya no podía ser igual cada momento; mi observación. Desde entonces, algo se transformó en mi bajo esta experiencia extraña, loca de tan mía.
www.elvirasantamariatorres.co.uk/single-post/2020/05/09/encierro-solar
Esta obra de arte de proceso concierne a la vivencia y transformación del tiempo y espacio en el ámbito físico, psicológico y artístico, más en estos días de amenazas invisibles, incertidumbre y encierro. Sin un tema específico a tratar, quise atravesar estos días cruciales en el desarrollo de la pandemia (Covid-19) en México, comprometiéndome con una labor de meditación activa, analítica y re-significante. Me propuse generar un proceso de deconstrucción y reconstrucción física y simbólica de materiales y elementos significativos para mí, y, muy posiblemente, abiertos y generosos hacia la percepción y apertura psíquica de otros individuos. Concretamente, me puse a producir tinta de diversas flores y me escribí con ella a mí misma en el devenir de un proceso que empiezo a altas horas de la noche con un periodo de 20 horas de trabajo ininterrumpido, y así, por veinte días, disminuyendo cada día una hora, me vi desplegar mi propio tiempo en un ensayo de la palabra, la acción, la noche, el día y algo que ya no podía ser igual cada momento; mi observación. Desde entonces, algo se transformó en mi bajo esta experiencia extraña, loca de tan mía.